Las demoras en el ingreso a Argentina a través de las casillas de Migraciones deja un gran cúmulo de vehículos, que a media mañana del lunes, estancó al tránsito por sobre todo el puente internacional Roque González.
Las demoras ya son algo frecuente. Primero fue la asimetría cambiaria, que benefició al asalariado argentino y que provocó el éxodo de pasajeros hacia Encarnación. Luego las conveniencias para los comerciantes encarnacenos que compraban productos como aceite y harina en Posadas, trajo contingentes enteros de paraguayos a Argentina . En definitiva, el puente internacional no descansa jamás.
Lo cierto es que las autoridades del Gobierno argentino no saben o no pueden tomar medidas que logren la fluidez encima del viaducto de una buena vez por todas, porque pese a las inauguraciones, las filas siguen estando. Aunque ahora, y en parte gracias a las nuevas casillas de salida del país, la fila se hace notar más a la vuelta que a la ida. FUENTE MISIONES ONLINE
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