En la tarde del domingo Pablo Caballero Irala fue advertido por vecinos de que un automóvil de color gris con dos ocupantes dentro se encontraba estacionado frente a su local comercial de manera sospechosa. De inmediato se trasladó hasta el lugar encontrando la puerta de blindex violentada y al inspeccionar el interior descubrió que los malvivientes se habrían alzado con dinero que tenía guardado en un cajón en su habitación por una suma que asciende a los 18 millones.
Intervinieron efectivos de la comisaría 30 y prosiguen las investigaciones
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