Una sorprendente historia se inició hace algunos meses cuando tres jóvenes miembros de una misma familia vieron un anuncio por internet sobre vacantes en puestos laborales en la ciudad de San Pablo – Brasil y se aventuraron a tomar la decisión de ir en búsqueda de una mejor vida, con buenos ingresos y las posibilidades de progresar.
Erika Yaquelin López Medina de 18 años, Francisco Javier Do Santos de 19 y un menor de edad les comunicaron a sus familiares que habían conseguir un buen trabajo en el país vecino e irían para obtener mejores ingresos, fueron apoyados por sus seres queridos y fueron partícipes de una historia de terror que nunca olvidarán.
Cuando llegaron a su lugar de trabajo que era una fábrica ubicada en la ciudad mencionada se encontraron con su “patrón” que es un hombre llamado Julio César Ríos Estevez de nacionalidad boliviana. Todo marchaba bien en un principio y los tres jóvenes trabajaban con entusiasmo pero cuando llegó la fecha de su pago no cobraron casi nada porque les descontaban una serie de cosas increíbles como la utilización de artículos de limpieza dentro de la empresa. Con el correr de las semanas y los meses la situación se fue agravando y su paga solo era una comida por día que luego se convirtió en un plato de comida cada dos días.
Un día no aguantaron más la situación y en un descuido vieron el portón de la fábrica abierto y corrieron para escapar, intentaron denunciar en una Comisaría y no tuvieron una respuesta favorable, luego intentaron hacerlo con la Policía Federal, según versiones y tampoco obtuvieron ayuda. Deambularon hasta poder contactar con el Consulado Paraguayo, donde por fin se iniciaron gestiones en un trabajo mancomunado con la INTERPOL para lograr la repatriación de estos jóvenes, que por el momento son los dos mayores quienes se encuentran sanos y salvo en su vivienda del distrito de Cambyretá.
El menor de edad aún se encuentra en Brasil siendo asistido por el Consulado Paraguayo ya que hay otros procesos burocráticos en donde deben intervenir sus padres para poder traerlo. Por fortuna todos están ilesos aunque muy impactados por todo lo que les sucedió, por otra parte se inició una investigación contra el ciudadano boliviano por el crimen de trata de personas, esperan obtener justicia y que otras personas no tengan que pasar por esto.
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