Un fin de semana muy movido se vivió en casi todos los ámbitos en el Departamento de Itapúa, teniendo en cuenta la Nochebuena y Navidad que tenía al pendiente por sobre todo a los funcionarios de salud que se encontraban de guardia para atender a las personas que ingresaban al Hospital Regional de Encarnación.
Afortunadamente las estadísticas reflejaron números muy positivos en algunos ámbitos, ya que por ejemplo no se registraron heridos por la utilización de pirotecnia que era una de las preocupaciones más grandes, tampoco ingresos en demasía por accidentes de tránsito, heridas por armas o accidentes domésticos. En el nosocomio hubo 12 nacimientos, 30 procedimientos quirúrgicos y 130 pacientes dentro del hospital. Sin embargo, en cuanto a la ocupación de camas, siguen al límite en el sector de adultos, pediatría y neonatal.
Lo cierto es que los nuevos ingresos no han hecho colapsar el sistema de salud y se espera que durante el año nuevo estos números se mantengan o inclusive mejoren para comenzar el año 2023 de la mejor manera.
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