Una triste imagen nuevamente presenta el lago Ypacaraí, en medio del importante descenso del caudal, que dejó al descubierto una gran cantidad de sedimentos y basura. Muchos estudios ya se realizaron para salvar al lago, sin resultados positivos.
La contaminación del espejo de agua se arrastra desde hace más de dos décadas sin que se hayan logrado importantes mejoras para revertir la crítica situación.
Millonarias sumas se han “invertido” en estudios y proyectos de recuperación del lago, sin resultado visible hasta hoy. Casi todos los años, las cianobacterias (algas tóxicas) hacen su aparición para refregarnos en la cara el escaso interés que se tiene para recuperar el espejo de agua.
Son 21 municipios, de la cuenca del lago, los que descargan constantemente sus desechos sólidos y líquidos en los arroyos cuyas aguas llegan hasta el lago Ypacaraí.
Los arroyos Capiatá, San Lorenzo, Yukyrymí, Yukyry, Pirayú, Ypucú y varios otros cursos hídricos llegan contaminados al lago, ante la falta de alcantarillado sanitario y una política ambiental adecuada.
En 2012 se había presentado el proyecto de alcantarillado sanitario, principalmente para Areguá, San Bernardino e Ypacaraí, pero el llamado a licitación fue suspendido.
Recordemos que, cuando el lago presentó su peor cara, en 2012, todo un aparatoso equipo interinstitucional liderado por los entonces ministros de la Corte, Antonio Fretes; de Obras Públicas, Enrique Salyn Buzarquis, y el titular de la Secretaría del Ambiente, Heriberto Osnaghi, recorrieron de punta a punta la cuenca del lago Ypacaraí para «salvar» al lago.
Años después, el lago Ypacaraí continúa contaminado, ninguna empresa infractora ha dejado de funcionar y ningún propietario pasó por un proceso judicial. Solo se ejecutaron sanciones administrativas por degradar los cauces hídricos que desembocan directamente en el espejo de agua.
El MOPC, los 21 municipios y las tres gobernaciones aún no presentaron un programa concreto de alcantarillado sanitario para las ciudades que integran la cuenca del lago.
Desde el Ministerio de Obras Públicas informaron que el proyecto de alcantarillado sanitario para Areguá fue licitado, pero el proceso fue suspendido por inconvenientes técnicos, en tanto que para la ciudad de San Bernardino está en el estudio de factibilidad.
Por otro lado, el director de Control de Calidad Ambiental de la Secretaría del Ambiente, Lic. Jorge Brítez, dijo que las condiciones del lago están dentro de lo normal. Agregó que la bajante del espejo de agua se debe a la falta de lluvias, que son típicas en esta época del año.
Manifestó que la cantidad de sedimentos que se ve principalmente en la playa de Areguá es propia del comportamiento del lago. “El lecho del lago tiene lodo, con mucho sedimento y el viento ahora hace que se levante y se quede en la orilla, en especial en Areguá, debido al comportamiento del agua y las olas”, dijo el funcionario ambiental.
Manifestó que se está realizando un monitoreo constante del comportamiento del lago y sus afluentes. Según los datos, hay menos presencia de nitrato y fósforo, que favorecían la proliferación de las cianobacterias (algas tóxicas).
“Tenemos datos de que ha bajado la presencia de nitrato y fósforo en relación al del 2012, cuando tuvimos la situación más crítica. Si bien no bajó tanto como esperábamos, no ha aumentado, y eso es un dato importante”, puntualizó.
En cuanto a las fiscalizaciones a las posibles empresas contaminantes, hasta la fecha se realizaron 500, de las cuales 100 firmas están con sumario administrativo. De esta cifra, el 30% ha adaptado sus establecimientos según las exigencias ambientales para evitar la contaminación.
El funcionario de la Seam dijo además que hay incluso firmas que fueron cerradas y clausuradas en su funcionamiento porque no se adecuaron a la exigencias ambientales.
EUTROFIZACIÓN
El color verde y luego negruzco de las aguas del lago Ypacaraí se debe principalmente a la eutrofización por exceso de nutrientes, provenientes de cloacas sanitarias e industrias ubicadas en la cuenca. La eutrofización provoca el crecimiento exagerado de algas y estas le dan un color verde y al pudrirse toman el color negro.
La única forma de evitar la floración de las algas es limitando la cantidad de contaminantes en el lago. Para esto se debe construir el alcantarillado sanitario en Areguá, Ypacaraí y San Bernardino y controlar mejor a las industrias de la cuenca. FUENTE ABC COLOR
Este medio no se hace responsable ni partícipe de las opiniones vertidas por los usuarios de esta sección. Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.