La suspensión de clases presenciales en escuelas, colegios y universidades podrían prolongarse por lo menos hasta el primer trimestre del próximo año, así lo dio a entender el ministro de Salud, Julio Mazzoleni, quien acentuó que mucho dependerá de la aprobación de una vacuna.
La curva ascendente de infectados por el Covid-19 sumerge en un escenario de mayor incertidumbre a lo relacionado con el retorno a clases.
Si bien aún faltan meses por delante, la situación denota en que probablemente la vuelta de los estudiantes aún puede estar lejana.
El ministro de Salud, Julio Mazzoleni, en contacto con radio Monumental 1080 AM, fue contundente al decir que la aprobación de una vacuna contra el nuevo coronavirus incidirá en la planificación a futuro.
“Si las cosas continúan como están ahora, yo creo que no (se retorna a las clases presenciales)” expresó, aunque también indicó que hay tiempo para ver cómo se comportará la parte epidemiológica.
En ese aspecto, subrayó que los factores a tener en cuenta para la toma de decisión incluyen además el índice de consultas hospitalarias de niños y cómo va afectando la enfermedad a esta este sector poblacional.
Apuntó que octubre será un mes clave para tener una idea acabada de si los proyectos de vacuna son realmente efectivos o no. “La secuencia que debe darse es que la tercera fase, en la cual están al menos cinco proyectos, debe culminar. Ese periodo de tiempo como mínimo nos llevaría a octubre” explicó.
Luego de haber superado esta etapa, según manifestó, hasta fin de año, alguna entidad reguladora de alto nivel tiene que dar luz verde y a partir de ahí puede iniciarse la distribución de las vacunas.
“Yo creo que el escenario más optimista sería el primer trimestre del año que viene. No obstante, los esfuerzos logísticos ya se están dando y la gente, bajo riesgo, está preparando esas vacunas bajo la esperanza de que esta tercera fase culmine exitosamente”, agregó.
La CoronaVac es uno de los proyectos de vacuna que está siendo fabricada en São Paulo, Brasil, a través de un convenio con un laboratorio chino.
Lleva adelante la tercera fase de pruebas, en las que unos 1.000 médicos, enfermeros y funcionarios de Salud son los voluntarios.
La dosis será aplicada en dos dosis con una diferencia de dos semanas entre sí y con una periodicidad anual.//ÚLTIMA HORA
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