En un juicio que culminó hoy, Pedro Wilson Peña Balbuena fue condenado a 25 años de prisión tras ser hallado culpable del homicidio doloso del intendente del distrito de José L. Oviedo, Wilfrido Ocampos Benítez. El crimen, ocurrido el 5 de marzo de 2013, estremeció a la comunidad local y movilizó un complejo proceso de investigación que involucró tanto a la justicia nacional como a peritos forenses.
Los hechos
El asesinato tuvo lugar en la compañía Cañada Loma Hovy, cuando Ocampos Benítez se dirigía desde su domicilio hacia la Intendencia Municipal a bordo de una camioneta de la institución. Alrededor de las 6:25 de la mañana, Ocampos se detuvo para abrir un portón que, en circunstancias inusuales, estaba semi-cerrado. En ese momento, fue emboscado por tres sujetos armados que emergieron de un bosquecillo cercano.
Según el testimonio de un vecino de la zona, vio cómo Ocampos descendía de su vehículo y, acto seguido, fue atacado. Uno de los atacantes, descrito como un hombre alto y flaco, fue el primero en disparar, seguido por otros dos individuos que portaban armas cortas. Los tres agresores huyeron del lugar, internándose en los bosques cercanos. El testigo, quien se encontraba ensillando su caballo en el momento del ataque, fue el primero en acercarse a la víctima, pero ya no presentaba signos vitales.
La investigación
El Ministerio Público desplegó una exhaustiva investigación para esclarecer los hechos y capturar a los responsables. Los esfuerzos incluyeron allanamientos, análisis de dispositivos electrónicos y la colaboración de testigos clave. Evelio Acosta Zarza, quien actualmente cumple condena, fue identificado como uno de los responsables, lo que llevó al hallazgo de pruebas que involucraban directamente a los hermanos Ramón Peña Balbuena y Pedro Wilson Peña Balbuena.
Un teléfono celular incautado en la residencia de Acosta Zarza, resultó ser una pieza clave en el caso. Las pericias forenses realizadas al dispositivo permitieron identificar a Ramón Peña Balbuena, quien se encontraba en constante comunicación con su hermano Pedro Wilson y con Evelio Acosta, el autor intelectual del crimen.
Los mensajes extraídos del celular indicaron que Pedro Wilson Peña Balbuena, estuvo en contacto permanente con Ramón y Acosta en los días previos al asesinato. De acuerdo con las investigaciones, Pedro Wilson habría planeado el homicidio como parte de un negocio y recibió una compensación económica por su participación.
El juicio
Durante el juicio, el Ministerio Público bajo la titularidad del Abg, Rolando Ortega, presentó pruebas concluyentes que vincularon a Pedro Wilson Peña Balbuena con el homicidio, incluidas las comunicaciones telefónicas y los testimonios de testigos. La fiscalía argumentó que el acusado fue el autor material del crimen, ejecutando el asesinato con premeditación y a sangre fría.
Las pruebas forenses incluyeron la comparación de prendas personales encontradas en una residencia con las que aparecían en las fotografías del teléfono incautado. Estas coincidencias reforzaron la implicación de Pedro Wilson y Ramón Peña Balbuena en el homicidio.
Finalmente, el tribunal dictaminó que Pedro Wilson Peña Balbuena actuó como autor material del asesinato de Ocampos Benítez, condenándolo a 25 años de prisión. Esta sentencia pone fin a un largo proceso judicial que mantuvo en vilo a la comunidad de José L. Oviedo durante más de una década.
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