Llamativamente, la postura del Ingeniero Orlando Valdés, hoy presidente de la Asociación de Ingenieros Eléctricos del Paraguay sobre la maquinización de Aña Cuá cambió drásticamente al mismo tiempo que su posición dentro de la binacional.
En el año 2012, Valdés encabezó y firmó el estudio para la maquinización del Brazo Aña Cuá donde sentenciaba que la Entidad Binacional Yacyretá se encontraba en condiciones de terminar la ejecución de las obras previstas en Aña Cuá sin necesidad de solicitar su aprobación a otra instancia o poder del Estado.
Entre otros puntos, Valdés, que en ese entonces ocupaba el cargo de Asesor del Consejo de Administración de la Entidad Binacional Yacyretá, aseguraba que el proyecto no violaba la soberanía ni la integridad territorial del Paraguay y que además no quebrantaba la seguridad nacional ni la política exterior de nuestro país.
Asimismo, resolvió que la obra no debía tomarse como nueva represa ya que la misma es complementaria y accesoria a la principal.
El documento emitido el 15 de noviembre de 2012 “Informe sobre antecedentes del Proyecto Central Hidroeléctrica Brazo Aña Cuá” que evaluaba los aspectos técnicos, ambientales, financieros y económicos, recibía como conclusión que el “Consejo de Administración por el Tratado de Yacyretá se encuentra suficientemente habilitado para disponer la realización de las obras del proyecto Aña Cuá” aprobando los trabajos necesarios para tal fin.
Pero su opinión con relación a la maquinización del Brazo Aña Cuá, cambió abruptamente pocos años después de que haya presentado este estudio, en coincidencia con el cambio de Gobierno. A través de una publicación del 18 de setiembre pasado en un matutino de la capital del país, Valdés criticó duramente el proyecto calificándolo como “un brutal negociado a cambio de la entrega de la soberanía nacional” además en un giro radical, en otro artículo del mismo medio capitalino exige que el acuerdo para la maquinización de Aña Cuá pase por el Congreso y que éste debe rechazarlo, en total contradicción con el Memorandum 01/10 con fecha 02/02/10 firmado por el mismo Ingeniero Orlando Valdés donde el documento concluye que: “Llevando en consideración lo establecido en el numeral I del Anexo B del Tratado de Yacyretá, Tercer Párrafo podemos concluir que el Consejo de Administración de la Entidad Binacional Yacyretá está en condiciones de terminar la ejecución de las obras previstas en el Brazo Aña Cuá sin necesidad de acudir a ninguna otra instancia del Poder del Estado”
En el artículo periodístico, Valdés aseguró que detrás de los “fuegos tecnológicos de artificio”, utilizados en la presentación simultánea del proyecto Aña Cuá, se agazapan violaciones del Tratado y por ende de la soberanía paraguaya en Yacyretá, echando por tierra su propio estudio.
En el documento presentado en el año 2012, Valdés incluso resaltaba las bondades del proyecto, remarcando que la obra generaría la creación de más de 1.000 puestos de trabajo, especializado y no especializado por un lapso de 4 años en otros varios puntos positivos que respaldaban la ejecución, pero en un cambio del viento político pasó a contradecirse restando credibilidad al estudio que él mismo encabezó y aprobó cuando trabajaba para Yacyretá.
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