Los 888 días de cautiverio de Abrahán Fehr tienden a tener el final menos querido. Ayer se encontraron restos óseos, que serían del colono menonita, en la estancia San Eduardo, ubicada en Tacuatí, San Pedro. Estaban envueltos en una hamaca, una camisa de color verde oscuro, pantalón vaquero, un zapatón de color negro y un quepis. El EPP, a través de una gran cantidad de panfletos, guio a los investigadores para el macabro hallazgo.
Todo empezó a la mañana cuando en la referida hacienda el EPP dejó varios panfletos y un escrito con detalles del sitio donde enterraron el cuerpo de uno de los secuestrados, haciendo alusión al menonita Abrahán Fehr.
Agentes de la Policía Nacional, de la Fuerza de Tarea conjunta (FTC), al mando de Héctor Grau, los fiscales Alberto Torres y Joel Cazal, llegaron al sitio indicado en el panfleto, muy cerca del río Ypané, límite natural entre los departamentos de San Pedro y Concepción. Ese lugar está ubicado a 20 kilómetros de la colonia Santa Clara, donde el colono fue secuestrado el 8 de agosto. de 2015.
La autoridades efectivamente encontraron una fosa señalada con una bandera blanca, cavaron aproximadamente un metro y medio de profundidad y hallaron los restos óseos.
También llegaron a la zona los hermanos de Abrahán Fehr, quienes manifestaron que las vestimentas halladas, también enterradas, eran similares a las que tenía puestas su hermano cuando fue secuestrado y que el quepis que estaba allí con la inscripción Toyota era el mismo que solía utilizar Abrahán.
Llamó la atención la cantidad de panfletos, pero no trascendió su contenido.
Los restos óseos fueron trasladados a la capital del país para la identificación que recién podría ser posible en 30 días.
Pero para los investigadores es casi un hecho que Fehr sea la cuarta víctima fatal en cautiverio del EPP y el primer colono menonita secuestrado y asesinado.
Un detalle muy importante es que los secuestradores nunca enviaron una prueba de vida por Fehr.
Esto hace suponer que ya pudo haber muerto poco después de su secuestro.
Fehr tenía problemas de hipertensión, por lo que precisaba de medicamentos. No se descarta que murió súbitamente en la hamaca donde lo tenían en cautiverio y lo hayan enterrado envuelto en ella.
Mucho por confirmar, dice ministro
Anoche, en ABC Cardinal el ministro del Interior, Lorenzo Lezcano, declaró: “Respecto a los restos óseos que fueron encontrados, hay muchas cosas por confirmar. Las respuestas van a tomar su tiempo, está trabajando la policía y la fiscalía. Por tanto, queremos ser responsables con la investigación y no entorpecerla con supuestos”.
Agregó: “El gobierno nacional no solo tiene como estrategia las operaciones militares en la zona norte”. Indicó que las acciones van destinadas a mejorar la calidad de vida de los pobladores de esa parte del país en materia de viviendas, infraestructura vial y salud. “Recordemos que el miedo que pretende imponer el grupo criminal es fuerte, por tanto nuestras acciones deben ser aún mayores para terminar con la inseguridad, pero reitero, esto toma más tiempo, aunque es más seguro”, refirió.
Criminales prometieron una “salida” al caso
El grupo criminal EPP habría condicionado a familiares de Bernhard Blatz y Franz Hiebert que si cumplían todas las exigencias económicas y distribución de víveres a gente de escasos recursos, iban a liberar a su familiares (aún no se cumplió) y también iban a dar “una salida” al caso de Fehr.
En medio de todo, el presidente Horacio Cartes expresó a través de las redes sociales su solidaridad con los familiares secuestrados. Esta mañana los parientes de Fehr estarán en la morgue judicial.
Anoche el médico forense Pablo Lemir dijo que los restos óseos son de una persona de origen caucásico, estatura mediana y cabellos rubios. ABC COLOR
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