La Sra. Gladys González, vecina del Barrio San Blas de Cambyretá habló en representación de la comunidad sobre el problema de agua que sufren hace años, situación que ha empeorado en los últimos tiempos.
El servicio sufre cortes sorpresivos, sin aviso previo a los usuarios por parte de la ESSAP, quienes tampoco conocen los motivos.
La situación complica a las amas de casa que no cuentan con el recurso para los quehaceres domésticos.
Desde las 19:00hs. el servicio sufre cortés y durante el día no hay presión, aseguran.
A pesar del pésimo servicio, las facturas para el cobro del consumo del agua potable llegan sin falta cada fin de mes a los hogares.
Esperan que haciendo público este reclamo, obtengan una solución definitiva a la problemática.