La australiana Irene O’Shea, de 102 años, protagonizó el viral más sorprendente de la semana al tirarse al vacío desde 4.000 metros de altura en su tercer salto, estableciendo un récord que seguramente será muy difícil de romper. La bisabuela hizo la proeza como parte de una campaña para recaudar fondos para fines médicos.
La mujer se precipitó a una velocidad de 220 kilómetros por hora sobre la ciudad de Langhorne Creek y minutos después solo se quejó levemente de la temperatura. «El cielo estaba despejado e hizo un buen día aunque pasé mucho frío», declaró la paracaidista más anciana del mundo.
[responsive_youtube https://www.youtube.com/watch?v=0HwJp9fEGw8 ]
La primera vez se había tirado cuando cumplió los 100 años, lo que en su momento también fue un récord. Al año siguiente, volvió a saltar y recaudó 8.600 dólares. En su tercer salto esta semana, tenía exactamente 102 años y 194 días. En realidad, el motivo de sus lanzamientos tiene que ver con un episodio que la había afectado profundamente.
Irene había perdido a su hija por una enfermedad de la neurona motora. Por eso ella quiso realizar el increíble salto para ayudar a recaudar dinero para la Asociación de Enfermedades de Neuronas Motoras de Australia Meridional, según The Advertiser.// FUENTE: RT
La televisión acompañó todo el proceso de su lanzamiento, apoyada en su bastón y caminando con un poco de ayuda.
Este medio no se hace responsable ni partícipe de las opiniones vertidas por los usuarios de esta sección. Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.