La Reforma tuvo su origen en las críticas y propuestas con las que diversos religiosos, pensadores y políticos europeos buscaron provocar un cambio profundo y generalizado en los usos y costumbres de la Iglesia Católica, además de negar la jurisdicción del Papa sobre toda la cristiandad. El movimiento recibirá posteriormente el nombre de Reforma Protestante, por su intención inicial de reformar el Catolicismo con el fin de retornar a un cristianismo primitivo, y la importancia que tuvo la Protesta de Espira, presentada por algunos príncipes y ciudades alemanas en 1529 contra un edicto del Emperador Carlos V tendiente a derogar la tolerancia religiosa que había sido anteriormente concedida a los principados alemanes.
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Comenzó con la predicación del sacerdote agustino Martín Lutero, que revisó la doctrina de la Iglesia católica, según el criterio de su conformidad a las Sagradas Escrituras. En particular, rechazó la teología sacramental católica, que, según Lutero, permitía y justificaba prácticas como la venta de indulgencias, un secuestro del Evangelio, el cual debía ser predicado libremente, y no vendido.
El Pastor de la Iglesia Cristiana Reformada de la ciudad de Encarnación Natanael Vera, explicó que esta reforma significó un cambio radical en la historia de la religión cristiana como así también tuvo su significancia en el ámbito político, social y cultural de casi todos los países del mundo.
Como Pastor de una iglesia evangélica, agregó que hasta la fecha la Iglesia cristiana aún necesita de reformas similares a la que impuso Lutero, tales como la de tener las Sagradas Escrituras como única autoridad como así también la “venta de milagros” que muchas denominaciones aún siguen practicando inclusive bajo la sombra de lo que realizó Martín Lutero para el protestantismo.
El 31 de octubre de 1517, el monje Martín Lutero clavó una propuesta a las puertas de la iglesia de Wittenberg, Alemania para debatir la doctrina y práctica de las indulgencias. Esta propuesta fue popularmente conocida como las 95 tesis, que fueron clavadas en las puertas de la Iglesia del Castillo. La Iglesia del Castillo se encontraba en la calle principal de Wittenberg, así la puerta de la iglesia funcionaba como un tablón público y era por tanto el lugar lógico para colocar noticias importantes. Además, estas tesis estaban escritas en latín, la lengua de la Iglesia, y no en su alemán vernáculo. Sin embargo, el hecho generó una dura controversia entre Lutero y aquellos aliados del Papa sobre una variedad de doctrinas y prácticas. Cuando Lutero y sus seguidores fueron excolmulgados en 1520, nació la tradición luterana.
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