La semana pasada, especialmente el jueves 30 de agosto, el mercado regional afrontó una serie de turbulencias, principalmente por la crisis que azotó a Argentina, cuya divisa cayó bruscamente ante el dólar americano. Sin embargo, esto hace que sus productos se abaraten respecto al guaraní, por lo cual las compras de paraguayos serán más baratas, señalan.
El guaraní se devaluó solo 6%, mientras que en la contrastación de los tipos de cambio hay una diferencia de 40%, lo cual significa que los productos argentinos se volvieron más baratos para el poder de compra de los paraguayos, según enfatizó el economista Ricardo Rodríguez.
“Esta situación de crisis argentina abarata los productos de consumo principalmente de Clorinda, por ese lado los estratos más bajos se benefician en Paraguay de bienes de consumo más baratos. Hay un efecto positivo por ese lado”, dijo.
La moneda paraguaya también sufrió el percance, donde las expectativas locales también tomaron un papel clave para que se devalúe ante el dólar.
La cotización llegó ese día en G. 5.830 por unidad minorista, costo que rompió toda expectativas esperada para fin de año. Hoy el precio nuevamente se ubica entre 5.790 y 5.800 guaraníes, en el mercado de casas de cambio.
En cuanto a la crisis en Argentina, el analista señaló que el factor externo en Estados Unidos es uno de los principales epicentros del fortalecimiento del dólar, debido a que la tasa de interés del sistema financiero norteamericano que se establece por la banca central, está cada vez más alta.
En consecuencia de un devenir de aumentos y la tasa recorta poco a poco lo que volvió muy rentable para los megafondos internacionales, en el caso de pensiones y fondos jubilatorios. “Todos vuelven un poco a los Estados Unidos, lo que hace que se fortalezca”, indicó.
El economista Juan Cresta aclaró que el dólar también subió por la expectativa que se generó en el mercado interno, antes de que sucedan las cosas afuera.
Desde el Banco Central del Paraguay señalaron que el guaraní se devalúo ese jueves en 3,42%, mientras que el peso chileno, 7,26%, seguido de uruguayo, con 12,45%. Las monedas más “golpeadas” fueron las de Argentina y Brasil, con 135,36% el peso y 31,94% el real. LA NACION
Este medio no se hace responsable ni partícipe de las opiniones vertidas por los usuarios de esta sección. Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.