Un problema social trajo consigo la muerte de un niño de 7 años arrollado esta mañana por un camión sobre la Avda. Japón y Capellán Molas en el barrio San Roque de Encarnación. El niño era hijo de una vendedora de yuyos y diariamente recorría toda la cuadra, hacía mandados a los trabajadores y jugaba entre los puestos de venta.
Esta mañana, al intentar cruzar la calle fue arrollado por un camión y falleció de forma instantánea.
Ante este trágico hecho, opiniones dispares se generaron en la cuadra, mientras unas vendedoras decían que ese lugar no es para los niños, otras respondían que no tienen donde dejar a sus hijos y que deben de llevarlos hasta sus puestos. Otras de las alternativas es la creación de una guardería para ayudar a las madres trabajadoras.
Lo concreto del caso es que diariamente se podrán observar varios niños en esta tradicional cuadra.
Por de pronto, desde la Policía Municipal de Tránsito, anunciaron que tomarán nuevas medidas al respecto en búsqueda de la seguridad de los trabajadores, sus hijos como así también de los transeúntes.
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