POLICÍA EJEMPLAR: «LO QUE ME PASÓ NO ME DETENDRÁ PARA AYUDAR A LA GENTE»

“El miedo quiso apoderarse de mí, pero yo aprendí que con el miedo no avanzás. Yo pude haber muerto en aquel accidente, así que todo lo que me pasó y pueda pasar desde aquel percance es bueno”, dice el suboficial Nicolás Sosa, de 28 años, mientras se mueve al compás de su silla de ruedas en el interior de la comisaría 31 Yro’ysã, del departamento del Guairá, donde presta servicios.

Un accidente de tránsito, hace un poco más de 5 años, lo catapultó a la dependencia motriz, tras una fuerte lesión. Sin embargo, en base a su voluntad y sacrificio, espantó las suspicacias y aprendió a vivir con entusiasmo para superarse día a día.

“Cuando desperté de aquel accidente estaba boca arriba e inmóvil. Se me soltaron las lágrimas, pero rápidamente comencé a mentalizarme en que iba a salir de esta, pero sabía que tenía que pasar por etapas. Pero me propuse seguir mi sueño y lo estoy cumpliendo: servir a los demás como policía”, dijo el suboficial.

“Nací para servir y lo que me pasó no me detendrá para ayudar a la gente y para atrapar delincuentes”, agregó, dejando en claro que todavía hay policías que honran el uniforme.

Sosa piensa y actúa con fe y esperanza. No duda en responder que algún día volverá a recuperar la movilidad de sus piernas.

“Sé que volveré a caminar y seré el mejor en mi profesión. Mi vocación es ayudar a la ciudadanía. Servir y ayudar a los demás me da felicidad”, confesó. “Intento ser lo más feliz posible en lo que hago, y así todo es más fácil”, finalizó.

“Si uno se plantea objetivos claros, puede conseguirlos”
El poli Sosa demuestra sus ganas de superar los límites y de que no hay barreras que lo dejen avanzar. “Lo que yo quiero ayudar a transmitir es que si uno se plantea objetivos claros, puede conseguirlos. Busco cambiar esa visión que si uno está en silla de ruedas no puede hacer esto o aquello. Hay que eliminar esa idea”, agregó. “Agradezco a mis compañeros que me ayudan día a día”, finalizó.

El tremendo accidente que marcó su vida
El accidente de tránsito que dejó al suboficial Sosa en silla de ruedas ocurrió el 23 diciembre del 2013 en Paraguarí, dos días antes de su cumpleaños. En aquel accidente el conductor del vehículo perdió la vida.

“Ese día (23 de diciembre) era el cumple de mi mamá y lo que más quería era estar con ella. Salí del trabajo (prestaba servicios en Asunción) para viajar a Guairá, pero el micro nunca pasó. Fue ahí que recibí la llamada de un camarada que me dijo que unos primos de él iban a ir a Villarrica y que podía ir con ellos. ‘Bueno’ le dije. Después pasó lo que pasó, no sé ni cómo. Lastimosamente el conductor falleció”, se lamentó.

“Yo me fracturé todo. Tengo 25 tornillos en el muslo y me rompí dos costillas también. Pasé mi cumpleaños en el hospital”, dijo Sosa.

PROMOCIÓN. El suboficial Nicolás Sosa pertenece a la promoción 2009 de la Academia Policial. “Ser Policía es lo que siempre quise ser, y lo estoy cumpliendo y doy gracias a Dios”,dijo.

NOVIA. Sosa comentó que vive con su pareja en la zona de Yro’ysã, en Colonia Independencia y que ella le apoya en todo. Arriero vai isuérte voi jajaja”, bromeó el uniformado. // Crónica


Este medio no se hace responsable ni partícipe de las opiniones vertidas por los usuarios de esta sección. Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales. Itapúa en Noticias se reserva el derecho de eliminar aquellos comentarios injuriantes, discriminadores o contrarios a las leyes de la República del Paraguay

,
error: Content is protected !!