La Municipalidad de Encarnación volvió a quedar bajo la lupa este martes, tras una manifestación realizada por conductores de plataformas digitales de transporte. El motivo: el cobro de un canon que, según denuncian, se exige para poder seguir operando dentro del municipio.
La medida fue calificada por los trabajadores como un impuesto encubierto, aplicado sin una explicación concreta sobre qué servicios o beneficios recibirían a cambio por parte del gobierno municipal.
El concejal Eduardo Florentín se refirió al conflicto, apuntando que la disposición proviene de una reciente normativa impulsada por la administración municipal, con el objetivo de “regular” el funcionamiento de estas plataformas. El edil, que dialogó con representantes del gremio, remarcó la importancia de revisar el marco normativo y atender los reclamos del sector.
Desde el gremio de conductores adviertieron que el canon representa una carga económica injustificada que podría terminar afectando tanto a quienes prestan el servicio como a los usuarios.
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