Durante los meses de enero y febrero, el consumo de energía eléctrica alcanzó niveles récord debido a la intensa ola de calor que afectó la región. El 12 de febrero, se registró el pico más alto de consumo, alcanzando los 4905 MW a las 14:14 horas, destacando la dependencia de sistemas de refrigeración y aire acondicionado en medio de las altas temperaturas.
Este aumento significativo en la demanda energética provocó desafíos en el suministro eléctrico, especialmente en áreas donde se concentra el uso masivo de aires acondicionados. A pesar de ello, se reportaron pocas interrupciones gracias a los esfuerzos de mantenimiento preventivo y reforzamiento de las líneas de distribución.
Se han identificado zonas con mayor incidencia de cortes, particularmente en puntos críticos como transformadores, donde los fusibles operaron por protección ante la sobrecarga. Ante esta situación, se están llevando a cabo labores de mantenimiento y repotenciación para fortalecer el sistema y garantizar un servicio eléctrico eficiente.
La región sur ha sido objeto de una atención especial, con iniciativas continuas de fortalecimiento del servicio eléctrico para mitigar los cortes durante los periodos de alta demanda, como los meses de verano. Estas acciones incluyen evaluaciones de necesidades, limpieza, mantenimiento y ampliación de la infraestructura eléctrica, con el objetivo de mejorar la experiencia del usuario y minimizar las interrupciones en el suministro.
