La mamá de la víctima, contó l que la menor estaba sentada y el depravado la manoseó. Presa del susto la chica, que estaba con su hermano y su madre, se paró y pálida fue donde estaba su progenitora a contarle lo sucedido. Inmediatamente los pasajeros se solidarizaron con ambas y el abusador fue detenido por personal de Gendarmería.
El hecho ocurrió el miércoles pasado por la tarde. La mujer contó que junto a su hijo, retiró a su otra hija del colegio para luego ir en tren a Encarnación. Por la tarde cuando volvían subieron al transporte y se sentaron, ella con su hijo y la su hija en otro asiento de adelante. En un momento determinado casi a mitad del puente, notó que su hija se paró y sin mediar palabras la miraba desorientada. Pensó que le había bajado la presión o que tenía ganas de vomitar por el viaje. Insistió en que le diga que le pasaba y fue cuando la menor pudo acercarse y entre llantos contarle que el pasajero que venía a su lado la había manoseado. Inmediatamente la pusieron a resguardo y comenzaron a increpar al hombre que según dijo la mujer, “se hacía el dormido”.
Ni bien llegaron a la cabecera argentina Liliana y su hija entregaron sus documentos y pidieron socorro a gendarmes que estaban en el lugar. Los uniformados junto a personal de Aduanas la ayudaron y detuvieron al depravado. En ese momento varias personas que fueron testigos de lo sucedido expresaron su malestar y bronca por el accionar del hombre de 42 años. “En ningún momento el tipo se defendió, la gente le increpaba e insultaba. A nosotros nos trajeron hasta la comisaría seccional cuarta de la policía donde se le brindó asistencia a mi hija”, contó.
La menor que está siendo asistida por profesionales médicos de la Comisaría de la Mujer había manifestado que primero el degenerado le tocó la pierna y ella pensó que fue sin querer. Luego puso la campera sobre sus piernas y la manoseó. “Ella estaba dolida porque le manoseó fuerte y dijo que fue cuando se paró. Y ahí el tipo como que le agarró y fue cuando quedó pálida y vino donde estaba el hermano y yo”.
El hombre es oriundo de Mar del Plata y está preso. La menor, está siendo asistida y se instruye una causa judicial por abuso. “Yo cuento para que no le pase a otra persona y que este hombre le lleven a Mar del Plata esté preso no pueda volver a hacer lo que hizo. Le agradezco a los pasajeros que salieron de testigos, a los de la Aduana. Yo tenía una impotencia terrible y con mi hija asustada le bajó la presión. Fue horrible y espero que no le pase a nadie, que no vuelva a pasar”, dijo la mujer. FUENTE: MISIONESONLINE
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