Los primeros caso del Sindrome de leche anormal o leche SILA empezaron a registrarse alrededor del año 1983 y desde esa época se viene estudiando para mitigar este mal que suele producirse durante los periodos largos de sequía cuando el animal se ve afectado por la calidad de la proteína o la falta de minerales provocando que la leche se “corte” con mayor facilidad que en condiciones normales, si bien la leche es apta para el consumo y mantiene sus cualidades es imposible industrializarla en estas condiciones, señaló Rodrigo Sechi encargado del departamento lácteo de la Cooperativa Naranjito.
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“En el momento de la pasteurización la temperatura sube mucho de repente a unos 102º y este tipo de leche puede precipitar parando toda la producción por lo que no se puede industrializar” señaló Sechi recalcando que la leche sigue siendo de buena calidad y puede pasteurizarse en el ámbito doméstico ya que se usa menos temperatura, esta producción suele destinarse entonces a la producción de quesos caseros.
“Estamos hablando con los productores para iniciar las correcciones en los tambos donde se ha manifestado esta situación para que la alimentación sea mejorada equilibrando los niveles digestivos y así se puede regular este problema” Consideramos que cuando vuelvan las lluvias y los pastos se recuperen esta situación va a desaparecer, si bien aún es muy poca la aparición estamos atentos para que la calidad de la leche de nuestros productores sean siempre la mejor.
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