DETENIDO TRAS MORTAL ASALTO A COOPERATIVA

Uno de los integrantes de la banda de delincuentes que asaltó la cooperativa Carlos Pfannl en Independencia y asesinó a su gerente Wilfrido Metzinger fue detenido este jueves. Hay otros prófugos. La Policía sospecha que van de a pie y están desarmados.

El ladrón que fue atrapado se llama Wilson Xavier E Bonfim Dos Santos, de 21 años. En total, el monto robado y recuperado de la camioneta del asesinado fue de G. 143.000.000, informó Iván Leguizamón, periodista de ABC Color. Wilfrido Metzinger fue asesinado tras haber sido secuestrado. Se presume que, en la huida, el gerente de la cooperativa chocó adrede su camioneta para esquivar a un retén policial, lo que causó el enojo de los ladrones, que lo mataron y luego huyeron a pie.

Los delincuentes iban en tres camionetas, que abandonaron posteriormente en el camino, además de una patrullera que robaron al momento del asalto de la cooperativa, que ocurrió esta madrugada en Independencia, Guairá.

Anoche, un grupo tipo comando llegó a la casa de Metzinger y lo tomó de rehén. Le obligaron a llamar a una cajera, de nombre Rosana Elisabeth Acosta Benítez, quien fue hasta el sitio. Allí, ella también quedó en poder de los malvivientes.

Este grupo subió a la camioneta del gerente y fue hasta la sede de la cooperativa, a unos 500 metros. El guardia del sitio identificó la camioneta y no sospechó que se trataba de un asalto. Cuando los ladrones entraron a la cooperativa junto con los dos rehenes, el guardia fue desarmado.

Sin embargo, un policía estaba en el sitio debido a las amenazas de un posible asalto. La custodia especial se realizaba hacía un mes. La Policía ya manejaba la información de un supuesto asalto y dispuso ese resguardo permanente. Este oficial se enfrentó a los ladrones y pidió apoyo a las comisarías de la zona.

Asustados, todos se fugaron a bordo de la camioneta del gerente y ese vehículo fue escoltado por otras tres camionetas en que iban más delincuentes. En un momento dado, el gerente Metzinger cayó adrede a una cuneta al ver un retén policial. Allí fue ejecutado.

Los ladrones abandonaron todos los vehículos y el botín. Se estima que fueron entre 10 y 12. La Policía cree que estos estarían desarmados y a pie, escondiéndose en los cañaverales


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