Según datos proporcionados en representación de la administración de las playas de Encarnación, Sergio Godoy son aproximadamente 200 las lámparas del alumbrado público hurtadas a lo largo de la Costanera del barrio San Isidro de Encarnación.
En principio estas lámparas eran reemplazadas pero luego constataron que rápidamente volvían a ser hurtadas del lugar. Godoy agregó que según los datos que manejan, los responsables de esta serie de hurtos serían los propios vecinos y frentistas de la Costanera que posteriormente lo comercializan a costos ínfimos en las canchas de Pikivoley de la ciudad.
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Una de las soluciones inmediatas, había sido la colocación de rejas protectoras que también fueron hurtadas y utilizadas en la fabricación de parrillas que luego eran comercializadas de la misma forma.
En total son aproximadamente 5 km de Costanera los afectados por estos hechos delictivos que se teme que también afecte a otras zonas de la extensa Costanera de Encarnación.
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