Así lo aseguró la representante de la Asociación de Canoeros de San Cosme y Damián, Carolina Ibarra durante el lanzamiento de la temporada veraniega en ese distrito. En la actualidad, son tres las empresas que explotan el servicio de transporte desde la costa del Río Paraná hasta las Dunas brindando empleo digno a medio centenar de familias.
Estas familias serán las más afectadas en caso de que las Dunas de San Cosme desaparezcan y por ende el servicio, los mismos son obreros de estas empresas, mecánicos, fleteros, comedores, posaderas entre otros.
Ibarra comentó de que en temporada alta unas 120 personas visitan las Dunas de lunes a viernes, esta cifra llega a 600 personas los fines de semana generando un ingreso aproximado de Gs. 70.000.000 por semana que se distribuyen en toda la comunidad, constituyéndose en el principal atractivo para los turistas.
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Si bien la ejecución aún no inicia y este casi patrimonio itapuense está a punto de desaparecer, la EBY se encuentra desarrollando un proyecto de recuperación y conservación de este espacio turístico.
Por su parte, el Intendente Aníbal Maidana manifestó su preocupación sobre el riesgo de desaparición de las dunas y se mostró optimista ante la respuesta positiva de autoridades de la EBY para la preservación de este lugar
