Un Tribunal de Sentencia dictó una condena ejemplar de 11 años de cárcel para Germán Medina, de 35 años, quien fue declarado culpable de agredir sexualmente, golpear y herir con arma blanca a una mujer de 86 años en la localidad de San Cosme y Damián, Itapúa.
El terrible suceso ocurrió hace aproximadamente cuatro años y, según relató la fiscal Irene Rolón, estuvo marcado por un nivel de violencia inusitado. La víctima, una anciana con discapacidad visual, se encontraba en total indefensión cuando fue atacada. Los peritajes médicos evidenciaron la crueldad del hecho, que impactó incluso al profesional forense que intervino en el caso.
De acuerdo con la investigación, la mujer sufrió cortes en la mano derecha, mordeduras en el rostro y fue arrastrada por su atacante. “Se aprovechó de la indefensión de una persona mayor, sin posibilidad alguna de protegerse”, lamentó la fiscal. La recolección de muestras biológicas permitió confirmar la responsabilidad de Medina, quien, durante todo el proceso, no expresó arrepentimiento alguno.
A pesar de la violencia sufrida y el estigma, la víctima se presentó ante el tribunal para dar su testimonio, considerado clave para sostener la acusación y lograr la sentencia.
Rolón enfatizó que este fallo envía un mensaje contundente de cero tolerancia hacia la violencia sexual, especialmente contra personas en estado de vulnerabilidad, y reafirma el compromiso de la justicia de perseguir y castigar severamente este tipo de crímenes.
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