Un bebé de 3 meses, trasladado desde Villarrica al Hospital Regional de Encarnación, fue diagnosticado con COVID-19 tras ingresar a la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) con un cuadro de bronquiolitis. Según el protocolo, se realizó un hisopado al paciente, que arrojó resultado positivo para el virus.
El lactante se encuentra intubado, pero en condiciones estables, sin necesidad de medicamentos inotrópicos para mantener los signos vitales, lo que indica un cuadro controlado dentro de la gravedad. Este es el primer caso del año en el hospital que requiere terapia intensiva pediátrica por complicaciones asociadas al COVID-19.
El hospital, considerado de referencia nacional en cuidados intensivos pediátricos, recibe pacientes de diversos puntos del país, incluyendo casos remitidos a través del sistema SEME. Las autoridades médicas destacan la importancia de atender cuadros respiratorios virales, especialmente en lactantes, desde unidades especializadas para evitar mayores complicaciones.
El equipo médico continúa monitoreando la evolución del bebé, reforzando las medidas necesarias para su tratamiento. Este caso resalta la necesidad de mantener atención ante el COVID-19, especialmente en poblaciones vulnerables como los niños pequeños.
Este medio no se hace responsable ni partícipe de las opiniones vertidas por los usuarios de esta sección. Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales. Itapúa en Noticias se reserva el derecho de eliminar aquellos comentarios injuriantes, discriminadores o contrarios a las leyes de la República del Paraguay