No le importa el ruido omnipresente de las sirenas de los camiones amarillos, tampoco los gritos que de repente nacen en medio de la desesperación.
El niño está allí, imperturbable y concentradísimo, estudiando y aprendiendo, mientras su mami se calza el uniforme de “heroína” y acude a realizar una labor de esas en las que nadie quiere estar: salvar vidas en los incendios forestales.
La foto –que tomó un bombero– se viralizó y el pequeño Ian de 6 añitos enterneció a todos, cuando se puso a hacer sus deberes en el campamento que montaron los bomberos en la cercanía de uno de los focos de incendios que afectaron hace pocos días la zona de Itapúa.
“Lo tuve que llevar conmigo al procedimiento porque en ese momento no tenía con quién dejarle y cumplí con mi rol de mamá y de bombero a la vez. Hay que aclarar que él no estuvo en ningún momento en peligro, se quedó en el campamento con los demás, mientras yo acudí al corazón de uno de los focos de incendios allí en la cercanía”, contó a Crónica la Tte. María Brítez, mamá de Ian y bombero de la compañía K 103 de María Auxiliadora, Itapúa.
“Desde que estaba en mi panza me acompaña a los procedimientos. Muchas veces ya me acompañó porque quiere ir, le gusta mucho. En el cuartel ya aprendió muchísimo. Ojalá, algún día, pueda ser un gran bombero” añadió María, quien es muy admirada por sus compañeros por el esfuerzo que realiza para estar siempre al servicio de los demás.
“Insistimos con las personas a que cuidemos todos juntos nuestros recursos naturales y que siempre valoremos la familia”, dijo María.
“Aprende con nosotros siempre”
“La foto lo quitó un compañero, Ian se puso a estudiar con las letras mientras yo estaba trabajando apagando fuego. Va al primer grado y es muy aplicado”, confesó María.
“Nunca falta el que mal interpretan las cosas. Podrán decir muchas cosas por arrastrarle a mi hijo detrás mío en los procedimientos de incendios. Pero como te digo en ningún momento y bajo ningún concepto él se expone al peligro o riesgo alguno”, explicó María.
“Hace 16 años que cumplo con esta labor y la verdad que me apasiona. Y ver que mi hijo aprende con nosotros siempre me causa mucha alegría”, finalizó.
“En nuestra zona hubo muchísimos focos de incendio”
Tristeza, indignación y enojo son, sin dudas, algunas de las sensaciones que pueden llegar a aflorar en cualquier persona al contemplar a la distancia las postales de los distintos puntos del país ardiendo en llamas.
Esas mismas emociones son las que cuenta tuvo la teniente María Brítez desde el corazón de uno de los focos de incendios que afectaron hace pocos días en la zona de Itapúa. “Redoblamos esfuerzos. En nuestra zona hubo muchísimos focos de incendios y nos sobrecargamos de mucho trabajo. Gracias a Dios todos los voluntarios respondieron como corresponde y pudimos cubrir la mayoría de los servicios”, contó.//CRÓNICA
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